domingo, 1 de diciembre de 2013

"Es imposible construir la paz con corazones rotos" Francisco Papa

"Es imposible construir la paz con corazones rotos" Francisco Papa
*Por Silvia Stamato


En toda comunidad organizada de personas se producen diferencias porque algunas personas tienen una visión diferente de la realidad, no comparten valores, tuvieron una formación diferente, tuvieron diferentes experiencias, o provienen de culturas diferentes.

Y se dan formas sanas, que protegen a las personas,  favorecen las relaciones interpersonales y crean sentido de comunidad y otras que las ponen en peligro.

Cuando el conflicto o la diferencia entre personas es ignorado o disimulado -  "Aquí no pasa nada": 
La comunicación  se distorsiona, se vuelve, irónica, sarcástica y agresiva. Una persona pierde valor a los ojos de la otra. Esto se manifiesta primeramente en la comunicación no verbal.  Las personas involucradas se ven arrastradas a una distorsión perceptiva y cognitiva de la realidad. La misma se ve fragmentada.  Cualquier acción o comentario que realice el otro será interpretado en el peor sentido. Las partes están atrapadas en una guerra interminable. Esta percepción errónea de la realidad ajena genera conductas que van desde "lavarse las manos" hasta el atrincheramiento o la escalada. Ya casi solamente cabe el sálvese quien pueda, en que se pasa a la agresión verbal y/o física. Se trata de derrotar y vencer totalmente al otro, aniquilarlo. Muchas veces esta puede ser la base de los procesos de hostigamiento o acoso, o al menos el ambiente es facilitador de conductas de mobbing. Las personas, los otros,  no son respetados en su dignidad, solamente son un escalón para alcanzar los propios fines.

En cambio cuando se aceptan las diferencias, se acepta al otro en toda la riqueza que tiene como ser humano, en aquello que puede aportar, a pesar de lo diverso, se está buscando la la unidad. Se va más allá de lo que se puede apreciar en la superficie y se mira a los demás en su dignidad más profunda.   La solidaridad, el respeto, la empatía, la misericordia, entendidas en su sentido más hondo y desafiante, desarrollan una unidad que engendra nueva vida y contribuye al desarrollo personal y comunitario.

Y como dice Francisco en su carta apostólica Gaudium: "No es apostar por un sincretismo ni por la absorción de uno en el otro, sino por la resolución en un plano superior que conserva en sí las virtualidades valiosas de las polaridades en pugna. Con corazones rotos en miles de fragmentos será difícil construir una auténtica paz social."

Del 7 al 9 de mayo de 2014, los invito amigos, a trabajar por la paz
II Congreso Internacional de Mobbing y Bullying.
www.mobbingbullying.com.ar

No hay comentarios:

Publicar un comentario